Huellas

Escrito por Benny del Paso el .

huellas1

En una de mis visitas a la comisaría de la policía nacional sudafricana, me he topado con un panfleto publicitario dejado en todas las ventanillas de asistencia ciudadana en el centro. Junto a los formularios oficiales, junto a la ventanilla de pago de la comisaría, me topo con un montoncito de panfletos con un sugerente grafismo. La figura de un hombre con traje y maletín encadenado por su pie a una bola de acero. Y el mensaje de llamada: el pasado te acecha. Resuena en mi cabeza, a quién no. La idea golpea mi presente con leyendas del pasado. Una multa de velocidad del coche que ya no poseo, recibos de la seguridad social de empresas que ya no existen, malhumorados vecinos de una comunidad a la que ya no perteneces, un golpe hormonal adolescente al policía de turno. Tengo un pasado, y el panfleto me habla a mi. Lo leo.

Elimina tus antecedentes penales con una empresa líder en limpieza de historiales delictivos en Sudáfrica. Con el precio más barato del mercado, 150 euros. Un porcentaje de éxito del 99,95%. Garantía de devolución del 100% del dinero. 105% garantizado del precio más barato. Y actualizaciones a tiempo real online. 2000 antecedentes limpiados. Toma. Impresionante presentación. El nombre de la firma de abogados encaja con el servicio estrella del bufete: huellas2Empezar de cero. La función de un folleto publicitario es llamar la atención del potencial cliente, y abrir lo suficientemente su apetito de curiosidad como para que le sea imposible no agarrar el trozo de papel y guardarlo en su bolsillo. Estamos en la comisaría de la policía nacional, mi mano alcanza unos cuantos folletos firmemente, para que no se deslicen por mis dedos y acaben llamando la atención de los que están a mi alrededor. No quiero que el oficial de las fuerzas de seguridad sudafricana identifique mi interés por el servicio de limpieza de antecedentes penales. Lo tengo.

Cuando estoy solo, puedo recrearme en la lectura de la descripción de los servicios privados que se ofrecen en las instancias policiales. Cancelación de antecedentes penales, de delitos y faltas, admisión de culpabilidad investigación, eliminación de casos en espera de juicio. Tu vida puede torcerse en un instante por algo a lo que no das importancia cuando acontece. No recoger una multa de velocidad y evitar su pago puede convertirse en un problema en el futuro. Una oferta laboral puede torcerse por un antecedente de culpabilidad tan simple como la firma de conformidad en una infracción de tráfico. Estar en la lista de registrados de delitos menores o de menor gravedad en Sudáfrica es un problema.

En el debate sobre la reinserción de criminales, los sudafricanos se mueven entre defensores de la sociedad con una responsabilidad en hacer todo lo que se pueda para promover la reintegración de los delincuentes, entre ellos se encuentra el actual ministro de justicia “reintegración es uno de los principales valores de la justicia reparadora, comprometida con la afirmación de la dignidad humana y su valor, ofreciendo huellas3asistencia material y proveyendo dirección espiritual y moral”. Y para los que piensan que este discurso esconde la voluntad laxa del gobierno a la hora de combatir los altos índices de criminalidad en el territorio. Un antecedente penal es uno de las consecuencias inherentes más importantes que el sistema te impone y que muy a menudo tiene efectos muy a largo plazo. Incluso provocando la desproporción entre el castigo y el crimen perpetrado.

Sudáfrica sólo abre la puerta a la cancelación de los antecedentes penales a los delitos menores y crímenes no violentos, con penas menores a los seis meses de cárcel o al pago de fianza inferior a 1800 euros. Transcurridos diez años desde el cumplimiento de la condena y no ser reincidente durante ese periodo, se puede solicitar al departamento de justicia la cancelación de los antecedentes penales. Un requisito que abre la puerta a los emprendedores, abogados que buscan rentabilizar un desajuste burocrático.

Si comparamos con el código penal español, el sistema judicial sudafricano es austero en su concepción de reinserción social del delincuente. Sólo tiene que pasar dos años, sin reincidencia, desde la finalización de la condena para pedir la cancelación de penales en España, en delitos con penas de menos de 12 meses de cárcel. En los casos de penas graves, el tiempo aumenta a los diez años tras la condena. Sudáfrica siente resquemor y desapego hacia las políticas de reinserción social de los delincuentes. huellas4La constitución reconoce la justicia reparadora del criminal, pero el temor y la furia contra el criminal puede más en la psiquis de la mayoría de los sudafricanos. No ayuda el alto porcentaje de reincidencia criminal registrado en el sistema criminal de justicia sudafricano, aunque no exclusivo de este país. El número de crímenes registrados por la policía sudafricana el año pasado fueron casi dos millones cuatrocientos. El negocio es atractivo.

España no le sigue desde muy atrás. El año pasado se registraron casi dos millones cien de delitos en el territorio español. Entre los nuevos requisitos, muy populares, para ser seleccionado a entrar en el bombo de las ofertas laborales está el certificado de penales. Para ser apto para trabajar de reponedor o cajero en una de las muchas multinacionales textiles españolas nos piden estar limpio de penales. Marco el número de Empezar de cero.


Imprimir