Solsticio de invierno mágico

Escrito por Ulises 6ïé el .

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Siempre me había interesado la astronomía y el porqué de las estaciones.

¿Cómo sabían los granjeros cuando debían sembrar o cosechar?

Empecé a indagar en el reloj de sol y la sombra que proyectaba sobre el suelo en las diferentes estaciones del año. Fui dibujando con un cincel su extensión máxima en la puesta y la salida del sol, y empecé a descubrir, que había un día de mayor proyección de sombra. Un día en el que las sombras se apoderaban de la luz. El día de la noche más larga. Al menos en este hemisferio.

solsticio3Las cuatro estaciones me llevaron a la subdivisión del año en ocho, y me pregunté si alguien ya lo habría hecho antes y si esto valía para algo. Descubrí que no se llamaban estaciones, y se referían a algo llamado los ocho Sabbat, momentos del año altamente significativos.

A los ya conocidos equinoccios, días en que la noche y el día se equilibran en duración había que unirle el solsticio de verano con su mágica noche de San Juan, y el solsticio de invierno que coincidía aproximadamente con la noche buena. Sin embargo había otros cuatro días que para mí eran un misterio.

Halloween, y la noche de los difuntos se repartían el primer octavo, justo antes del solsticio de invierno donde toda la luz moriría y los granjeros se preparaban para el crudo invierno matando a los animales más débiles y celebrando la fiesta de la muerte para la vida y supervivencia de otros.

solsticio11La candelaria, se reservaba para febrero, y representaba el momento en que la luz empieza a nacer y recuperarse. Cuando los días empiezan a ser más largos y al tiempo lo percibimos como una renovación del ciclo. Era el momento de salir de las cuevas donde estábamos invernando a recolectar y cazar.

El primero de mayo y las canciones para conquistar a las mujeres, también tenían un hueco en el calendario como si de una época de celo se tratara con toda esa energía atmosférica y sin duda, era la mayor explosión de flores del año. Los ritos de apareamiento hacían estragos entre la población y en concreto los jóvenes por ser los más débiles químicamente.

Lughnasadh es el nombre del cuarto Sabbat Mayor que se celebra en agosto, suele coincidir con fechas abrasadoras de calor, donde la luz destruye a las sombras y las empequeñece hasta su mínima expresión. La energía es tal que la abundancia de la tierra es exuberante.

Los solsticios y equinoccios son en realidad los Sabbat Menores según les llaman y oscilan ligeramente sus fechas estacionalmente.

Aparentemente todo esto no tenía demasiada importancia, hasta que descubrí que había un significado mágico en todo esto.

Los días tenían otro nombre oculto detrás que indicaba el mejor momento para realizar ciertos cultos y ritos religiosos o mágicos. Sus nombres eran sonoros y atrayentes. Samhain, Imbole, Beltane, Lammas, por orden los Sabbat Mayores, Yule, Ostara, Litha y Mabon, los Sabbats Menores.

Cuanto más me internaba en este ámbito, más se me iba la cabeza, y mi mente empezaba a descubrir, la facilidad que había en estos días para realizar hechizos, invocaciones, curaciones, adivinaciones, conexiones con el más allá, confluir ritos para la fertilidad, sacrificios paganos de animales para dar las gracias y conseguir ciertos objetivos, equilibrado de energías en personas desestabilizadas química solsticio7o neurológicamente. Ellos conocían estos secretos de manera ancestral y atávica. Los habían guardado celosamente debido a su poder. Y a nosotros nos habían dado simplemente las fiestas, los puentes y celebraciones vulgares sin importancia.

Sin embargo ahora sé, que estas noches se hacen todo tipo de peticiones al otro lado y a otros seres. Ofrendas, misas del gallo secretas, sacrificios rituales para conseguir dones o inclinar la balanza a favor de unos pocos. Conexiones con los muertos que forzados cuentan y revelan secretos de vivos. Oraciones comunales y aquelarres de invocación para conseguir metales preciosos y otras sabias de la naturaleza. Influencias mentales y sociales para anular a seres humanos o que caigan en desgracia en los negocios como competidores.

Hablo de los paganos, pero también de las religiones, que poco a poco queman a todos aquellos que conocían y protegían estos secretos para mantener su exclusividad y secretismo en unos pocos. Suplantando las noches mágicas energéticas por otras con nombres amables que ocultan una gran verdad, pasando de lo pagano a lo religioso o descerebrante. Una nueva desprogramación de la sociedad cada vez más escéptica y dirigida. Sustituida espiritualmente.

Si cogemos un simple ejemplo de la biblia y nos remitimos a la historia del 25 de diciembre y el nacimiento, podemos observar la cantidad de niños que se mataron de forma ritual durante esos días buscando al mesías y que este y no otro libro sagrado narra. Lo que en realidad la historia oculta, es que se hacían este tipo de prácticas rituales matando a los recién nacidos o animales para conseguir otros favores de los dioses de solsticio6manera habitual. Esta noche, era la noche de los sacrificios rituales y los animales muertos los regalos, junto con el resto de la comida cosechada. Lo que realmente se celebra no es el nacimiento, sino la muerte. La muerte de la luz y del año solar.

Este año, tengan algo presente. No se trata solo del cambio climático, coincide la luna llena más energética que se da solo cada 28 días, con el día de navidad 25 de diciembre. Esto no ocurre cada muchos años, no se suele dar una conjunción astral de este tipo. Las noches más brillantes, durante las noches más largas y los días más cortos del año. Prepárense para el nuevo ciclo que viene el próximo año. Una renovación del ciclo mayor astral. Si tienen algún deseo, no duden en pedirlo a quien puedan o sepan, mágicamente, porque a partir de ahora todo cambia y comenzamos el próximo advenimiento. Tengan en cuenta, que otros aprovecharán su ignorancia para dominarlos y hacerlos débiles astralmente. Especialmente aquellos que han estado ocultándonos los saberes ancestrales durante siglos. Defiéndanse, con el conocimiento y celebren la noche pagana, del solsticio de invierno y no la simplista navidad.

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