lordpink

Historia del exterminio hetero

hetero1

Un día dos chicos Jaime y Lucas iban por la calle besándose y cogidos de la mano, entonces dos mujeres mayores crecidas por la seguridad que les da la sociedad empezaron a decir en voz alta: “Qué asco, mira esos degenerados, son antinatura”. Los chicos podrían haber ignorado como muchas otras veces los insultos y las humillaciones, pero decidieron que ya era suficiente y cambiaron de dirección hacia un nuevo rumbo que supondría un ejemplo mundial.

hetero2Se volvieron hacia la dirección donde estaban las señoras y cogiendo carrerilla, uno de ellos empezó a pegarle puñetazos hasta machacarla la cara. El otro viendo su ejemplo corrió hacia la otra y le propino fuertes patadas en el estómago para después con fuerza partirle la rodilla a la discriminante señora.

En el juicio argumentaron que no les importaba ir a la cárcel si con ello conseguían un poco de respeto para otros gays en el futuro. Y que los próximos heterosexuales se lo pensarían dos veces antes de volver a insultar o degradarles. Estaban hartos de tantos siglos de represión.

En otra parte del mundo llamado Nueva York una manada estaba violando a una mujer lesbiana esa misma noche. Esta vez no se desarrolló juicio para los chicos de la manada pues unas mujeres lesbianas y feministas habían visto el ejemplo de la pareja de gays en los noticiarios.

Se organizaron, y gracias a que la venta de armas era legal en ese país, compraron varias escopetas y pistolas. En el periódico al día siguiente salió un titular “La masacre de género”, patrocinada por el lobby armamentístico. En los tribunales, las aguerridas mujeres, declararon que ya era hora de frenar a las manadas y que se sentían orgullosas de ir a la cárcel por algo así.

hetero3Los ejemplos empezaron a contagiarse por todo el mundo. Una mujer transexual, decidió matar a sus padres en la india, para impedir que la casaran de manera acordada. En sus declaraciones argumentó. “El veneno que puse en la comida de mi familia es un reflejo del veneno que inunda esta sociedad donde las personas no somos más que un valor de venta. Deseo ir a la cárcel para que no vuelvan a casar a nadie por dinero y en contra de su identidad.”

Cuantos más casos se oían en la televisión y en los medios, más sucesos de rebelión aparecían en las noticias. Así fue como se quemó una iglesia Evangelista con todos sus seguidores dentro, incluyendo a una líderesa política retrógrada que había promovido leyes antiabortistas y la segregación de negros y maricones, retrocediendo las leyes en ese estado para impedir el matrimonio igualitario entre otras cosas. En pocos días los incendios en iglesias “se propagaron de la mano de gays, probablemente” como dijo la FOX. Pero la opinión pública se hizo eco de un movimiento antidiscriminación que incluía a muchas minorías oprimidas que se defendían tomando las armas y el fuego. Y la cosa aumentó a sectores no homosexuales.

hetero4Una concejala le disparó en la sien a un congresista fanático mientras gritaba: “¡Yo también tengo un hijo intersexual, hijo de puta!”. La madre fue a la cárcel por su hij@.

Cuantos más iban a la cárcel, más “orgullo” mostraban en los telediarios y se inmolaban por la causa diciendo que otros podrían por fin disfrutar de una vida en igualdad donde no serían apartados. Tanto fue así, que en Londres, se supo de casos donde policías dejaban escapar a los gays diciéndoles… “Los gays en el armario os ayudaremos a vencer”, incluso fiscales, que defendían a sus clientes con no demasiada convicción por los hechos cometidos por gays contra heterosexuales. Se creía que estos abogados también debían ser de sexualidad diversa y por eso perdían los juicios en favor de los supuestos delincuentes gays. E incluso en algún caso, algún juez falló sorprendentemente por falta de pruebas según él.

Aun así, en algunos países de África y Asia aún seguía habiendo pena de muerte si encontraban a dos hombres tocándose o teniendo relaciones sexuales. Y los heterosexuales les mataban por haberse querido en nombre de Dios.

hetero5En otros países donde no existía la pena de muerte pero si la pena de cárcel, decidieron que si había que ir a la cárcel, que fuera por algo real. Y se defendieron matando a sus perseguidores políticos y líderes.

Muchos habían sufrido durante las manifestaciones en las cuales venían agrediéndoles y deteniéndoles desde hacía años. Este era el caso de Rusia por ejemplo. Donde la lucha se recrudeció y los gays empezaron a quedarse con las caras de los que prohibían en contra de la libertad sexual para ir a buscarlos a sus casas por las noches. No se conformaron simplemente con matarles. Sino que les marcaban en la frente la palabra “ANTIGAY” con un cuchillo o con un hierro de marcar reses.

Al cabo de un tiempo la población heterosexual empezó a temer las represalias homosexuales que en muchos casos no tenían nada que perder por ir a la cárcel de otra manera y no por ser gays. Eso sí, lo declaraban en los juicios para infundir respeto y orgullo. Y poco a poco las cárceles se empezaron a llenar de gays orgullosos de haber sido detenidos por erradicar de la tierra a otro represor antigays. Lo que llevó a que algunas de las cárceles parecieran campos de concentración nazi para los, las, les LGTBIQ+.

Las sociedades empezaron a meditar sobre todo el odio que habían generado a lo largo de los siglos a través de su discriminación constante. Pero aún en África había guerrillas provocadas por las geoestrategias económicas de diversos países. Eran lugares donde la vida no valía nada, y se podía violar y matar impunemente sin ir a la cárcel. El hecho de ser gay, lesbiana, transexual o cualquier otra diversidad, te ponía inmediatamente en el punto de mira de un subfusil de asalto de cualquiera que pasara por ahí.

hetero6Sin embargo, empezaron las bombas en los campos de concentración, y los presos de diversidad sexual escapaban, organizándose en grupos para detener a los políticos, curas y en general todos los heteroradicales que por fin habían dado la cara de manera pública, alzándose como líderes del exterminio demoníaco que había poseído a todos los invertidos.

Empezaron a caer como moscas en todos los países. Era una guerra de hermanos contra padres, de amigas contra amigos y de desconocidos contra cualquiera que dijera una mala palabra discriminatoria. No se podía confiar en nadie. Pues cualquiera podía tener una inclinación sexual diferente. Y estos llevaban mucho tiempo en la clandestinidad moviéndose para poder tener relaciones sexuales. Sabían disimular muy bien su condición sexual, y pasaban desapercibidos entre la multitud. Había más de los que se creía y llevaban cuchillos, veneno o revólveres ocultos según fuera el sitio. En un momento deslizaban un gesto sobre el café de cualquier cafetería y alguien homófobo caía exterminado como una cucaracha.

Por fin un año después de una semana santa, donde algunos tronos como el de La Macarena, La Esperanza de Triana y El Gran Poder habían volado por los aires en mil pedazos dejando una gran conmoción entre la opinión pública. Se estableció que debía haber una tregua y un nuevo estatus social que llevara a la cordialidad. Se argumentó que algo parecido había ocurrido años atrás con las sedes arcoíris y los actos vandálicos que se repitieron innumerables veces. Y que esto había sido lo mismo.

hetero7Obligaron a los países más radicales a aceptar e instaurar leyes igualitarias. Aquellos que al principio se resistieron sufrieron las fuertes consecuencias a nivel político, económico y social de manera radical por parte del resto de naciones y por algunos de sus propios ciudadanos que siguieron bombardeando la propia identidad cultural y religiosa de su propio país.
En poco tiempo toda la humanidad aceptó que la discriminación no era el mejor ejemplo, y que las diferencias nos habían llevado a la mayor guerra civil de carácter mundial que el planeta había soportado.

Que el terrorismo no era lo que había pasado estos últimos años con los atentados y las agresiones, sino la opresión a la que se habían visto sometidas las víctimas durante siglos.
Por ello, se instauró un día internacional de la NO DISCRIMINACIÓN y los delitos de odio se tomaron muy en serio desde ese momento contra aquellos que atacaban a las minorías.
Una tarde, dos chicas iban paseando por la calle cogidas de la mano y besándose y cuando se cruzaron con alguien… no pasó nada.

Imprimir

lanochemasoscura